El iPad ha obtenido en Düsseldorf una importante victoria frente a las tabletas inmediatamente competidoras, en el caso Apple contra la surcoreana Samsung, a la que acusaba de copiar su «estilo comunitario», algo protegido en la UE. La icónica compañía de Redmond se asegura así una orden judicial que, según los analistas, impedirá por largo tiempo la venta en el primer mercado europeo de los ordenadores de mano Galaxy Tab 10.1 y 7.7. La primera sería «demasiado similar» al iPad registrado por Apple.

Samsung era acusada por los norteamericanos de haber plagiado su iPad-2, fuese tecnológicamente o en el diseño. Los fabricantes del Galaxy Tab han anunciado ya que recurrirán el fallo y emplearán todos sus recursos legales. Los coreanos han acusado por su parte a Apple de ir, en el fondo, contra el sistema Android y de haber roto patentes de tecnología wifi ostentadas por Samsung.

La casa madre ha mostrado desde Seúl su frustración, acusando a la magistratura de «limitar las opciones» del consumidor alemán, y europeo por más señas, amén de «obstruir el diseño y el progreso» en la industria del ordenador de mano, una de las pocas en crecimiento.

Aunque en este caso las patentes tecnológicas no eran objeto contencioso, Samsung —que en su Galaxy emplea el sistema Android— ha visto dificultada su carrera por coger a Apple con todo este proceso, lo que sin duda no ha solventado la sentencia. El tribunal ha confirmado una reciente orden temporal contra la venta en Europa de los Tabs fabricados por Samsung Alemania, que impidió su presencia en la feria IFA de Berlín.

El estilo de un producto, por vago que sea el concepto, se puede registrar y está protegido en el acervo de la Unión Europea, mediante el llamado derecho al «dibujo y modelo comunitario» (RCD), que defiende la propiedad del aspecto y sensación de un objeto en una sociedad. Apple había registrado con un RCD su iPad en 2004.

La juez Johanna Brückner-Hofmann ha dicho al dictar sentencia que la empresa coreana en Alemania, a diferencia del esfuerzo de otros como Asus o Toshiba, no se habría «preocupado suficientemente» de diferenciar sus productos de los de Apple y citó media docena de características de la apariencia del iPad.

Pero los abogados de Samsung, que recurrieron incluso a viejos cómics de Star Trek para demostrar que la idea de ordenador de mano tenía ya un aspecto similar antes que Apple, han insistido en que sería imposible que todo Tab no fuera similar a otros Tabs, dado que consistían en una pantalla brillante y extraplana dentro de un marco resistente y con cantos redondeados.